RESTAURANTE CASA LUCIO en BARCO DE ÁVILA

Judías del Barco

 Patatas revolconas

Carrilleras a la reducción de Pedro Ximénez.

Pimientos del piquillo rellenos de bacalao y gambas (me pusieron 2 de cada uno)

La cerveza súper fría, como nos gusta

Muchos años hacia ya que no iba a Barco de Ávila! Llegar allí y recordar sus calles, su puente, su castillo, sus bares y su río, me devolvió a mi infancia. Cuando mis padres me recogían en el campamento y pasábamos un día fantástico por las calles de Barco. Tristeza al final del día porque se marchaban, pero alegría de haber disfrutado de ellos un día entero. La verdad es que les agradezco que me dejaran formar parte de esa gran familia que éramos "Campamento San Fernando", enseñanzas únicas que creo que nos han acompañado a lo largo de nuestra vida, valores inculcados, por aquellos magníficos responsables, en los que confiaban plenamente para el cuidado de sus hij@s durante 15 días. Amor por la naturaleza, la paz, el compañerismo, la solidaridad, y el amor por todo lo bello que nos rodeaba, no habia maldad, solo verdad. Recuerdo a mis monitores, a mis compañeros y a los responsables, con mucho cariño y sobre todo después de haber recorrido esas calles empedradas y bordear ese rio Tormes. Por suerte mis hijos han podido disfrutar de este maravilloso ambiente, la mayor en los últimos años de este campamento y el pequeño, bueno ya no tan pequeño, que precisamente ayer hizo 18 años, del grupo scouts católico Pedro de Valdivia. Mas que nunca, desconectar de todo el caos en el que vivimos día a día y disfrutar solo de la naturaleza es un privilegio total. He disfrutado mucho de este viaje y aunque me he enrollado un poco, el motivo era homenajear a Restaurante Lucio, uno de los iconos de Barco de Ávila y que tantas veces nos ha dado de comer, año tras año, con su buen hacer, su buen trato y todo el amor que se respira nada mas entrar por sus puertas. En Casa Lucio se caracterizan por ser un restaurante  tradicional, que ofrece productos de insuperable calidad desde el año 1950. Los encargados han sido y siguen siendo actualmente Eva y Susana, las cuales se hacen cargo de CASA LUCIO como TERCERA generación. Especializándose en LA COCINA TRADICIONAL CASTELLANA. 

Porque cuando alguien hace de su trabajo su pasión, se nota y la prueba está en la cantidad de años que llevan al pie del cañón. Fantástico su trato y por supuesto su comida. Espectacular. Tengo que volver, me quede con ganas de comer el chuletón. Las judías fantásticas, puro placer en boca. Y los pimientos, para morirse. Las carrilleras deberían estar de locura porque mi marido solo me dejó probar un trocito. Lo dicho no podéis dejar de ir a probar esta comida casera pero fantástica que nada tiene que envidiar a un restaurante con estrella Michelin. Un besazo y no cambiéis!